Las palabras




No ríes ni rio 
ni das un paso atrás
como tampoco lo doy.
Censuradas son nuestras acciones,
impuestas por lo que no podemos decir.
Y el olvido
duele cuando no llega,
igual que duele el amor
cuando no se marcha.
El orgullo y el prejuicio
pueden más
que la pasión y el cariño.